Los pasajeros menores de edad no acompañados pueden viajar solos si se cumplen determinadas condiciones que varían en función de la naviera.
El padre, la madre o el tutor legal del pasajero menor de edad debe cumplimentar una declaración responsable con la firma auténtica de la policía o de la autoridad portuaria. Asimismo, el pasajero menor de edad debe llevar la copia original de la declaración para embarcar.
El personal del ferry o las autoridades portuarias serán los responsables de verificar los certificados y documentos de identidad.